

El agua es un recurso cada vez más escaso en Australia, especialmente en Australia Occidental, donde Perth es una de las ciudades más secas del continente. Por esta razón, nuestro objetivo es utilizar el agua de la forma más responsable posible para contribuir no sólo a preservar este bien escaso, sino también a mejorar nuestra capacidad de recuperación, ya que los efectos del cambio climático se dejan sentir cada vez más.
En nuestras malterías de Sídney y Perth utilizamos tecnología de filtración multietapa y ósmosis inversa para tratar todas las aguas residuales, de modo que puedan reciclarse parcialmente en el proceso y reutilizarse para limpieza y otros fines. La ósmosis inversa utiliza filtros superfinos para eliminar todos los contaminantes y está ampliamente considerada como una tecnología esencial para mejorar la resistencia climática de nuestros suministros de agua en el futuro. Gracias a un estricto control de calidad, tanto interno como externo, hemos podido reducir significativamente nuestra dependencia de la red local de agua y tenemos previsto extender esta tecnología a otras malterías en el futuro, siempre que sea posible.