

Durante las últimas décadas, hemos sido testigos de primera mano de cómo el cambio climático ha generado importantes riesgos y desafíos para el sector agrícola. Posteriormente, hemos buscado activamente formas de desempeñar nuestro papel para mitigar estos riesgos y adaptarnos a ellos para mejorar la resiliencia en toda nuestra cadena de suministro.
En línea con esta ambición, nos comprometimos con un socio externo en 2019 para lanzar un proyecto piloto para probar el uso de imágenes satelitales como una herramienta de inteligencia de cultivos. Al utilizar tecnología avanzada de detección remota NDVI y EVI y vincularla a datos meteorológicos, las plataformas de monitoreo brindan informes semanales de desarrollo de cultivos, tendencias actualizadas de precipitación y temperatura, y modelos de cultivos de extrapolación que pueden identificar problemas de rendimiento y calidad potenciales en la cosecha. El proyecto piloto se llevó a cabo en Irlanda debido a la cadena de suministro estrechamente integrada que operamos allí, y los primeros resultados fueron muy positivos.
Utilizando los hallazgos de este piloto inicial, ahora estamos trabajando en estrecha colaboración con nuestro socio para desarrollar estas herramientas más al continuar con el año 2 del proyecto piloto. Al comparar los rendimientos de cebada recolectados reales de los campos del proyecto piloto con los valores registrados del NDVI, el objetivo final es desarrollar un modelo futuro de predicción del rendimiento de cebada. Además, también estamos desarrollando un tablero digital que monitoreará información valiosa y albergará un sistema de alerta temprana que brindará alertas sobre cualquier riesgo o amenaza potencial para los cultivos de cebada maltera en el suelo. El objetivo de estas herramientas es mejorar los rendimientos y la calidad de la cebada cultivada por nuestros agricultores y, a su vez, reducir el uso de agua y minimizar el desperdicio de alimentos. Hacerlo no solo protegerá sus medios de vida y beneficiará a sus respectivas comunidades, sino que también aumentará la resistencia de nuestra cadena de suministro al cambio climático.